HÁBITOS DE VIDA SALUDABLE
Los estilos de vida de las personas o su modo de vivir, es uno de los factores que más influye en la salud.
Los cambios sociales y laborales actuales han provocado modificaciones en estos estilos de vida, que han llevado a un alejamiento de la dieta mediterránea y al incremento del sedentarismo, lo que ha supuesto un aumento de enfermedades crónicas no transmisibles (cardiovasculares, respiratorias, diabetes, obesidad, algunos procesos oncológicos y de salud mental).
Es muy importante facilitar a adolescentes y jóvenes, claves para una alimentación saludable y potenciar la práctica de actividad física, por los beneficios físicos, mentales y sociales que proporciona, facilitando pautas para combatir la presión mediática y publicitaria de productos y alimentos poco saludables, y contrarrestando los malos hábitos que por desinformación se dan en esta población.
BENEFICIOS DE LA ACTIVIDAD FÍSICA
Mejora la forma física, la función cardiorrespiratoria, la fuerza muscular y la masa ósea y, además, disminuye la grasa corporal y ayuda a mantener un peso saludable.
Mejora la salud mental: mejora la autoestima, reduce los síntomas de ansiedad y depresión y disminuye el estrés. Además es divertido y ayuda a sentirse más feliz.
Ofrece oportunidades de socialización y el aprendizaje de habilidades.
Aumenta la concentración, lo que contribuye a tener mejores resultados académicos.
Favorece un crecimiento y desarrollo saludable
Mejora las habilidades motrices, la postura y el equilibrio
Disminuye el desarrollo de factores de riesgo asociados a enfermedades crónicas en la vida adulta.